(Por Enrique Lécaille) El ex delantero de la selección uruguaya está radicado en los Estados Unidos, desde donde compartió con @gesor parte de sus vivencias en el mundo del deporte. El jugador repasó su larga trayectoria que lo llevó a defender a clubes de distintas partes del mundo. Aunque se le recuerda por su papel de futbolista, Gutiérrez fue también un destacado jugador de baloncesto. Su caso es excepcional en el deporte profesional uruguayo, pues ha sido campeón en fútbol y básquetbol, al más alto nivel.

-¿En qué ciudad de los Estados Unidos estás radicado, exactamente?

“En Hollywood, en el Estado de Florida”.

-¿Cuánto tiempo llevas por allí?

“Diez años ya, pero siempre pendiente de mi tierra, donde tengo a mi querida madre y muchos otros afectos entrañables”.

De Egaña al Mundo

-En Montevideo tú triunfaste tanto en básquetbol como en fútbol, antes de irte al exterior. ¿Cómo fueron tus comienzos en Soriano? ¿En qué clubes te formaste en esos deportes?

“En fútbol comencé  como la mayoría, en el baby fútbol, con ese gran Director Técnico que fue “Tío” Cabrera, que marcó una época en el Club Sendas, hasta que pasé a defender a La Lancha de Egaña, en Primera División, en la Liga Regional del Centro. Y mi formación en el básquetbol fue en el Club Praga, donde estuve 13 años en las inferiores, con “Pilo” Moyano como entrenador”.

-¿Recordás algunos de los jugadores que estaban en la Primera de Praga, cuando tú estabas en las inferiores?

"Cómo no! Estaban mis ídolos: Sol Charruti y Carlos Salvo. Otro integrante de aquel plantel era José Pedro Guastavino".   

-¿Qué amigos recuerdas de aquellos años en Mercedes?

“Tengo muchos amigos en Mercedes. Si tuviera que hacer una lista, seguro sería muy larga, pero en especial recuerdo a mis grandes amigos de la infancia, Jorge Mondada, ya fallecido, y Oscar Pérez, amigos del alma. Y en Montevideo también hice muchas amistades, como por ejemplo con Marcelo Sánchez, con quien jugábamos juntos en Bohemios y hoy preside esa institución”.

El Praga de Mercedes

-Recuerdo cuando te fuiste a Montevideo a jugar básquetbol, en Bohemios, pero ¿cómo surgió después la posibilidad de hacer fútbol a nivel profesional?

“Bueno, yo a los 16 años me fui a la Capital, con la ilusión de jugar fútbol, pero me fue difícil entrenar porque paralelamente estaba estudiando y entonces decidí practicar básquetbol, vinculándome a las inferiores de Bohemios, en una época memorable del club. Logramos tres campeonatos juveniles y dos títulos en la categoría reserva. Luego en mayores ganamos tres campeonatos Federañes y dos Liguillas. Eso nos permitió ir a tres torneos sudamericanos de clubes. Hay una cosa que la gente no sabe y es que a mí en Bohemios me habían puesto de sobrenombre “Praga”, porque siempre andaba con una camiseta de mi querido club de Mercedes. Sin embargo, más allá de mi situación como basquetbolista, de alguna manera yo seguía ligado al fútbol. Jugué en la Liga Universitaria, en Defensor. Salimos campeones y campeón de campeones. Teníamos un cuadro que estaba a la altura de cualquier equipo profesional. En la Liga jugaba con el Profesor Gonzalo Barreiro, muy conocido por su labor como preparador física a nivel de clubes y selecciones. Un día me presentó a dirigentes de El Tanque Sisley, club que en ese momento estaba en la Divisional C. Firmé contrato con El Tanque Sisley, pero seguí jugando al básquetbol. Hacía las dos cosas. Practicaba de tarde con El Tanque Sisley y de noche con Bohemios. Verdaderamente es como escribió José Enrique Rodó: Juventud, divino tesoro”.

-¿Quiénes te dirigían?

“Los técnicos en básquetbol eran Omar Ayala y Victor Hugo Berardi, mientras que en fútbol estaban Miguel Piazza y Marcelo Barrutti”.

-¿Cómo hiciste después? Porque imagino que habrás que tenido que tomar una decisión…

“Bueno, jugué al baloncesto hasta los 23 años, pero, claro, llegó un momento que tuve que decidir y me incliné por el fútbol. Ese año salimos campeones con El Tanque Sisley. Jugué una temporada en la Divisional B y me salió el pase para el exterior, a Colombia. Me fui a jugar al Sporting de Barranquilla, junto a otros uruguayos, como Edison De la Iglesia, un volante que había jugado en Wanderers. Al regresar al país, con Progreso obtuvimos el Campeonato Uruguayo, en 1989, algo inolvidable. Aquello fue una locura, algo histórico para el barrio La Teja. El Director Técnico era Saúl Rivero y el preparador físico el Profesor Gonzalo Barreiro”.

-¿Qué jugadores recuerdas de aquel Progreso histórico que fue Campeón Uruguayo?

“Mirá, teníamos un equipazo, con jugadores como Pedro Pedrucci, Leonardo Ramos, Johnny Miqueiro, Próspero Silva, el golero Leonel Rocco, además estabámos muy unidos como grupo”.

-Eso te abrió las puertas para avanzar en tu carrera, supongo…

“Sí, el título de Campeón Uruguayo con Progreso me dio el pase a Nacional. Firmé contrato por una temporada, con la opción a mitad de año. A mitad de año, usé la opción para ir a Defensor Sporting, que tenía como Director Técnico a otro sorianense, el doloreño Raúl Moller, un muy buen entrenador y buena persona. Luego arregló Juan Ahuntchain y conquistamos el Campeonato Uruguayo, con otro equipazo. Entre otros estaban el golero Claudio Arbiza, Héctor Rodríguez, Mario Gastán, Marcelo Tejera, Guillermo Almada y Peter Méndez. Y además fuimos campeones de la Liguilla Pre Libertadores. Jugué la Libertadores y tuvimos un buen papel. Esa buena temporada en Defensor Sporting a su vez me abrió las puertas a la selección uruguaya, que era dirigida por Luis Cubilla. Así tuve la oportunidad de vestir la Celeste en una Copa América, en Chile, en 1991. Recuerdo que le ganamos a Colombia uno a cero, con anotación de Peter Méndez. Por un gol no pudimos pasar a los cuartos de final.

Las valijas, otra vez

"Al retorar a Uruguay, tengo la posibilidad de ir a España, por intermedio de Paco Casal, pero lamentablemente el pase no se confirmó. Surgió entonces la posibilidad de jugar en Chile, y firmé contrato con el Deportes Temuco. Después de estar en el fútbol chileno, regresé al país y arreglé con Central Español. Más tarde pasé a Basáñez. Jugué un año en la B. Recuerdo mucho ese campeonato, porque empezamos con 8 puntos de menos por incidentes de la temporada anterior y de todas formas salimos campeones, lo cual fue algo inolvidable para el club”.

-Después de ese título con Basáñez, volviste a jugar en el exterior…

“Sí, me fui a Centroamérica. Firmé con el Herediano, de Costa Rica. Después Guatemala, en Coban Imperial, Real España de Honduras y el Roble, de El Salvador, hasta que volvé a Uruguay, para jugar en Juventud de Las Piedras, con el “Indio” Walter Olivera como Director Técnico”.

-Pero ese no fue el final de tu carrera...

“Es verdad, no terminé allí. Después de jugar en Juventud, arreglé con el Frontera de Rivera, que ese año logró el Ascenso a Primera División. Una muy linda experiencia, sin dudas. Y por último jugué en Colonia Suiza, en el Club Artesano”.

-¿Cuál fue el gol más lindo que hiciste a lo largo de tu carrera?

“El gol más lindo que uno que le marqué a Danubio, con Defensor Sporting, una chilena desde afeura del área, en el Estadio Jardines del Hipódromo. Ese día ganamos con ese gol mío. Recuerdo mucho ese gol y muchos partidos de mi larga carrera, pero si me permitís, más allá del fútbol, te digo que el partido más difícil que tuve que afrontar en mi vida fue traer a mi hija a los Estados Unidos, para que la pudieran operar y salvarle la vida, debido a que sufría un tumor cerebral. Siempre agradeceré en ese sentido a todo el personal del Hospital Pereyra Rossel de Montevideo que atendió a mi hija durante el proceso de su enfermedad, y en especial a los doctores Castillo y Borbonet. Y si me permitís también, quisiera agradecer a dos ex compañeros del fútbol, Alejandro Larrea y Víctor De los Santos, gracias a quienes me vine a los Estados Unidos”.

-Gracias, William, por permitirnos repasar tu carrera, a la distancia.

“Gracias a @gesor, y permitime llegar a todos mis afecto personales de Soriano, con un fuerte abrazo”.

Perfil

Nombre completo: William Gonzalo Gutiérrez Cabrera

Fecha de nacimiento: 29 de marzo de 1963

Lugar: Mercedes (Departamento de Soriano)

Nombre del padre: Solano Gutiérrez

Nombre de la madre: Élida Cabrera

Fotos: William Gutiérrez con la camiseta de Bohemios de Montevideo, en Defensor Sporting (en la fila inferior, segundo, de derecha a izquierda) y con Sporting de Barranquilla (también en la fila inferior, segundo, de derecha a izquierda).

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