El presidente del PIT-CNT, Marcelo Abdala, expresó que este miércoles 3 de julio es un día de “festejo y alegría, ya que la Corte Electoral confirmó que se alcanzó la cantidad de firmas necesarias para habilitar un plebiscito” por la reforma del sistema previsional, que será puesto a consideración de la ciudadanía el domingo 27 de octubre.
La Corte Electoral confirmó a la Comisión Nacional por la Reforma de la Seguridad Social que se alcanzó la cantidad de firmas válidas, equivalentes al 10% del Padrón Electoral, para convocar a un plebiscito sobre la seguridad social. La convocatoria popular se realizará junto con las elecciones nacionales el domingo 27 de octubre.
Por su parte el PIT-CNT informó a través de un comunicado, que se alcanzaron las firmas necesarias para habilitar el plebiscito para modificar aspectos claves del sistema de seguridad social en Uruguay.
La Corte Electoral ha validado la recolección de más de 276.151 firmas, correspondientes al 10% del Padrón Electoral, lo que permitirá someter a votación popular la eliminación de las AFAP, la fijación de la edad de retiro en 60 años y la igualación de las jubilaciones mínimas al salario mínimo nacional.
Tras la confirmación de que habrá plebiscito, el presidente del PIT-CNT, Marcelo Abdala, dijo que es un día de festejo y alegría. “Ahora a dialogar con toda la ciudadanía para convertir la seguridad social en un derecho humano en una sociedad que avanza hacia una vida mejor”.
“Se dio lo que sabíamos que iba a ocurrir, porque las firmas estaban, fueron recolectadas trabajosamente en los lugares de trabajo y en los barrios, de una manera modesta pero muy firme”, dijo Abdala.
El presidente de la central sindical destacó que de ahora en adelante se podrá debatir públicamente y conversar con toda la población sobre las tres medidas “cautelares” de protección de las personas: modificar la Constitución de la República para permitir que el trabajador pueda elegir jubilarse a los 60 años, garantizar que la jubilación mínima, después de toda una vida de trabajo, sea equivalente al salario mínimo nacional y eliminar el lucro financiero de las AFAP de la esfera de la seguridad social.
Por otro lado, Abdala rechazó las críticas provenientes desde el oficialismo referidas a que, de resultar aprobado el plebiscito, las reformas generarían inconvenientes a la próxima administración. “No se generará ningún problema, a menos que alguien piense que es una catástrofe que una persona que trabajó toda la vida, después de dar todo su esfuerzo para el país, obtenga una jubilación mínima que supere la línea de pobreza; o que a un trabajador, al que le confiscaron cinco años de vida cuando se elevó la edad de jubilación, pueda jubilarse a los 60 años. Veremos qué opina el pueblo y qué dice en octubre”.
Abdala anunció que la Comisión Nacional por el Plebiscito ha decidido solicitar una reunión con autoridades de todos los partidos políticos para sugerirles “elevar el nivel de la discusión, salir de las prédicas que pretenden únicamente atemorizar a la gente, y presentar fundamentos sólidos y argumentos verdaderos”.
El PIT-CNT convoca a los medios de comunicación a una conferencia de prensa que se llevará a cabo el día este jueves 4 de julio a las 11:30 horas, en la sede central de Jackson 1283.

La financiación de la reforma
Por su parte, el secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Enseñanza Privada (SINTEP) e integrante del Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT, Sergio Sommaruga, resaltó que se están propugnando tres ideas para enmendar democráticamente el artículo 77 de la Constitución de la República, garantizar el aumento de las jubilaciones y pensiones mínimas, devolver al trabajador el derecho a jubilarse a partir de los 60 años y eliminar las AFAP. “Queremos centrar el debate en estas tres propuestas para que sea argumentativo, asertivo, racional y sin descalificaciones”.
En declaraciones efectuadas al Informativo de Radio Sarandí, Sommaruga se refirió a un estudio del Instituto Cuesta-Duarte del PIT-CNT, relacionado con la interpretación de la reforma, que será presentado a los legisladores.
En cuanto a la financiación de la reforma de la seguridad social, dijo que tiene cuatro componentes de costos. En primer lugar, afirmó que equiparar las jubilaciones y pensiones mínimas con el salario mínimo nacional tiene un costo de 460 millones de dólares por año a valores de 2023, lo que representa la mitad de lo que estiman los técnicos del Banco de Previsión Social (BPS), porque interpretan que la reforma abarca a todos los jubilados y pensionistas. “Claramente establecemos que este aumento de prestación se circunscribirá a las personas cuyo ingreso, por todos los conceptos, quede por debajo del valor del salario mínimo nacional. Esto beneficiará a 220.000 personas y no a más de 400.000”.
El dirigente sindical aclaró que no hay costos por retroactividad, y que “es insólito que los opositores lo planteen, ya que ninguna enmienda constitucional, salvo la fundacional, tiene efecto retroactivo. Una persona que hoy está cobrando la renta vitalicia por el Banco de Seguros del Estado la seguirá cobrando por dicho banco y no pasará a cobrar por el BPS, por lo que no se deben sumar 216 millones de dólares como costo”.
Los dos restantes componentes tienen que ver con que el 80% de las personas que se jubilarán por el régimen mixto cobrarán menos de lo que percibirían si solo lo hicieran por el BPS, “y esa es la gran estafa de las AFAP”, advirtió. “Si esta reforma se aprueba, ocho de cada diez personas percibirán una mayor jubilación, por lo que esta reforma beneficia a las grandes mayorías. Al BPS le sobrarán más de 2,000 millones de dólares y solo tendrá un costo después de 2040. Sumado al costo de estimar cuánto saldría la restitución del derecho de los trabajadores a jubilarse a partir de los 60 años, se estaría hablando de un aumento del entorno de 2 a 4 puntos del Producto Bruto Interno (PBI), para después del año 2050”, expresó el dirigente sindical.

Fuente: web PIT-CNT