(Por Enrique Lécaille) En su época de futbolista, Diego Ruiz defendió 25 años la camiseta rayada del Club Bristol de Mercedes. Razones tiene, de sobra, para afirmar que está contento de “estar otra vez en casa”.

El entrenador no ocultó su emoción al iniciar este miércoles su actividad como responsable técnico de la institución “bohemia”, al frente de los planteles de Primera División y Sub-18. Con él conversamos en el viejo Parque Bristol ubicado junto al Puente Líber Seregni que atraviesa el río Negro, mientras sus dirigidos se preparaban para la primera sesión de entrenamiento.

Diego, estabas alejado del fútbol… ¿Qué te hizo aceptar este reto de volver a dirigir a Bristol?

“Bueno, en realidad como quien dice yo me había tomado un descanso, de cuatro a cinco años, porque a veces esta actividad te satura, pero de esto no podés olvidarte, cuando se lleva en la sangre. Por suerte los dirigentes se acordaron de mí. Cuando me propusieron dirigir, no tuve dudas en aceptar, sobre todo considerando que soy hincha de Bristol.  Ha sido el club de toda mi vida”.

¿Y cuáles son tus sentimientos al comenzar la labor?

“Me siento emocionado y orgulloso. Para cualquier técnico es un orgullo dirigir a un club tan importante como es Bristol”. 

¿Quién te va a acompañar?

“Mi ayudante va a ser Tito Cornelli, que es mi hombre de confianza”.

¿Y la preparación física?

“Yo me ocuparé de eso. Pero voy a conseguir un ayudante para la sub-18”.

¿Cuál será la propuesta futbolística de Bristol?

“Vamos a salir a ganar el campeonato, pero sin hacer inventos. No hay inventos en esto. Lo del sistema táctico, dependerá del rival, pero no vamos a inventar nada. Aquí con el poco tiempo que hay para trabajar, hay que seguir con una línea de juego a la que esté acostumbrado el jugador. A la larga esos inventos son perjudiciales”.

En la temporada anterior Bristol se coronó campeón sub-18… “¿En tu criterio está ascender juveniles?

“Sí, vamos a darle oportunidad a los jóvenes. Bristol viene trabajando muy bien en las divisiones formativas. Por eso yo le dijo a los dirigentes que se necesita uno o al máximo dos refuerzos, porque tenemos muy buenos jugadores juveniles, que vienen reclamando su lugar. Ellos se pueden sumar a gente de mucha experiencia como Chopitea o Vázquez. Mi intención es no hacer gastar a los dirigentes en jugadores que después van a terminar cubriendo a los nuestros. No me gustaría que un jugador formado en Bristol tenga que pedir pase porque no tuvo su oportunidad en el club. Ésa es mi forma de pensar y ya la apliqué cuando dirigí dos años. En el año 1996, le di su oportunidad en Primera División a Jorge Álvarez, que tenía 15 años, y terminó jugando toda la temporada”.

Después de defender 25 años al club, y repasando un poco tu trayectoria,  ¿Cuáles son algunos de los primeros jugadores que asoman en tu memoria?

“Bueno, yo tuve la oportunidad de jugar al lado de muy buenos futbolistas. Por citar algunos, podría nombrarte a Nelson Alberro, Juan Carlos Ocampo, Fregossi, "Chirico" Pérez, el golero Marcelo Toneguzzo, Carlos Fabeiro, Álvaro “Chiqui” Solari, “Tito” Mesa, que también estuvo por acá”… 

Cierta vez le escuché decir a un bristolense: “Es fácil dirigir a Bristol, porque no tenés la presión de una hinchada numerosa”… ¿Te parece que es así?

“No, no estoy de acuerdo con eso. Presión siempre hay, y más en el caso de Bristol, que es un club grande, y por lo tanto siempre hay que salir campeón. Es fácil en el sentido que no vas a encontrar a alguien me venga y te insulte cuando las cosas no salen. Por suerte la hinchada de Bristol es muy educada”.