Como todos saben los días 16, 17 y 18 de este mes de marzo, se reunirán en Dolores la Mesa Permanente y las Comisiones Asesoras del Congreso Nacional de Ediles.

Será una forma de rendir homenaje a esta ciudad emblemática de nuestro departamento, la que con impulso de su gente y como el ave fénix supo renacer tras la catástrofe que le tocara vivir un 15 de abril del 2016.

Los vestigios de aquel fatídico tornado aun quedan como un nefasto recuerdo.

Por toda esa carga emocional que un hecho tan lamentable como éste conlleva, es que deseo trasladar hoy una iniciativa al Congreso Nacional de Ediles.

Al efecto, quiero sugerir que, como complemento de toda la actividad a cumplir, se proceda a la colocación en lugar que las autoridades competentes determinen, de una placa de homenaje en nombre de todos los ediles del país.

Homenaje fundamental al pueblo de Dolores, que más allá de la reconocida solidaridad de todos, superó con entrega, amor y mucho sentido de pertenencia, este desastre climático que arrasó con todo lo que se antepuso a su paso.

Homenaje también a los fallecidos, verdaderos mártires, cuya sangre derramada cimentó el resurgir de un pueblo que jamás se entregó y que fue ejemplo de hermandad y humanidad, porque el dolor los unió más para salir adelante con fe y esperanza.

Por lo expuesto, quiero que mis palabras pasen en forma urgente al Congreso Nacional de Ediles y al Municipio de Dolores, convencidos de que encontraremos el eco debido a esta iniciativa.

Por otra parte:

Hoy de lo que voy a hablar me hago cargo primero como uruguayo, segundo como peón rural y tercero como edil departamental.

La situación por la que está pasando nuestro país no es la mejor de éstos últimos años. A la mayoría de nosotros se nos hace muy difícil cubrir los costos básicos de luz agua alimentación combustible, etc.

El sector que más divisas deja al Uruguay y que mas mano de obra da, se encuentra en una situación muy crítica, por los bajos precios que se le pagan al productor por la materia prima y por los altos costos  de producción, sumado a esto la situación climática por la que atravesamos que empeora aún más la cosa.

En mi humilde opinión creo que el Señor Presidente de la República Tabaré Vázquez debe dejar de lado su arrogancia y dejar de estar pensando en las urnas como manifestó, que esto no se trata de colores políticos. Esto se trata de que toda la oposición colabore con el oficialismo y que dejen de cuidar tanto sus sillones y su chacrita.

Todos sabemos la plata que se ha despilfarrado en estos últimos años, si todavía queda algo que la aprovechen para conquistar nuevos mercados y así poder vender nuestros productos al mundo.

Sabemos que nuestra industria láctea es reconocida por su buena calidad.

Sabemos también que la carne uruguaya es muy buena, y a esto le agregamos el valor de la trazabilidad, que no está de mas aclarar que la trazabilidad no es gratis para el productor se paga con dinero que se le retiene de sus liquidaciones.

En materia de granos el Uruguay es bueno produciendo semillas de calidad, para mi entender nuestros políticos se preocupan mas de lo que hace mal el otro o tomando venganza por no pensar como el oficialismo, caso particular retirando la declaración de interés nacional de la Expoactiva, que es una de las maneras de mostrarnos y vendernos al mundo.

Los políticos deberían levantar la mirada y ver a mediano y largo plazo, ver por las nuevas generaciones y por un Uruguay mejor. Porque si abrimos nuevos mercados se valorarán más nuestros productos y de éste modo las industrias darán más mano de obra y los comerciantes y productores van a necesitar más gente trabajando.

Por favor que todo el sistema político uruguayo deje de mirar las urnas y pensar en estrategias para la próxima elección y pensemos en conjunto por el bien de nuestro paisito. No puede ser que nos identifique en el exterior por haber legalizado la marihuana. Creo fehacientemente que tenemos cosas mejores para que nos reconozcan en el mundo.

Que mis palabras pasen a la Cámara de Diputados, a la Cámara de Senadores y a Presidencia de la República.