El periodista Samuel Blixen explicó cómo procedían los mandos militares durante el período de facto, fundamentalmente en la represión y desaparición de personas. Una investigación que viene realizando desde hace años, en base a documentos militares y judiciales. Arribando a una conclusión escalofriante: que María Claudia García de Gelman, nueva del poeta Juan Gelman, y madre de Macarena Gelman, no murió en la tortura, sino que fue trasladada, aún viva, hasta el sitio donde fue asesinada y enterrada.
Cementerio clandestino
"Por ejemplo, leyendo declaraciones del general Gloodtdofky, surge que en el 2005 se dio la orden de que en Batallón 14 se designaran dos zonas de enterramiento. Uno para el SID, el Centro de Información y Defensa, y otro para el OCOA, el Organismo Coordinador de Operaciones Antisubversivas, que eran las dos estructuras de inteligencia y operativas que funcionaban. Que son los responsables, además, de toda la desapariciones, salvo algún caso particular”, expresó Blixen en un tramo de la charla brindada en Mercedes. “Entonces, Gloodtdofky dice hay dos zonas. Y quiere decir que las víctimas de un organismo iban a quedar compartimentadas respecto de las víctimas de otro organismo. Y eso, para nosotros, implica un dato para poder buscar que si en esta zona aparecen víctimas de la OCOA, es posible que no haya víctimas del SID ahí.
Además nos lleva a concluir con otra afirmación que ahora se ha empezado a publicar, pero nosotros lo venimos diciendo desde hace tiempo, y es que en el 14 de Infantería, el cuartel del 14 de Infantería, es un cementerio clandestino. Tiene 400 hectáreas, puede haber zonas que no tienen nada que ver con enterramientos clandestinos, pero hay zonas del cuartel que configuran un cementerio clandestino. Y hasta ahora no se ha encontrado ninguna evidencia de que haya habido algún desenterramiento.
Y tampoco hay evidencia de uno de los episodios que implican desapariciones masivas y colectivas, que son el segundo vuelo, cuando se trasladan de Argentina en octubre de 1976 a los que estaban detenidos en Orletti, y las víctimas de la oleada represiva del SID y del FUSNA en Buenos Aires en 1977-78, donde hay cerca de 30 desaparecidos, entre los cuales hay muchos que son de Soriano, que no sabemos qué fue lo que pasó. Pero tenemos indicios, y eso lo hemos dicho en otro libro (“Intrigas cruzadas. Mafia y terrorismo en las Fuerzas Armadas”, 2023), de que muy probablemente han sido trasladados. Entonces, esos traslados, masivos, requieren tumbas colectivas”.
Falta mucho por buscar
Más adelante Blixen agregó: “En el 14 todavía no se ha encontrado, pero falta mucho por buscar. El día que se encuentren esas tumbas clandestinas, el choque, la acusación a los militares va a ser muy fuerte”.
“Nosotros pensamos que las tumbas clandestinas, se tienen que haber hecho en lugares donde los militares tienen el control de la zona. No los pueden hacer a capo abierto, donde los puede haber cualquiera. Además, Nilo tiene la convicción, y me parece muy acertada, de que una tumba de ese tipo, una fosa clandestina colectiva, no se puede hacer a mano. O sea, no la hacen los oficiales a mano. Se necesita maquinaria. Entonces, son todos elementos que, de alguna manera, se van configurando para orientar, en estos momentos, la búsqueda de los desaparecidos”.
María Claudia estaba viva
“Una de las cosas que yo me he preguntado siempre es, por qué el juez que estaba en la causa donde declaró Aguerrondo, ¿por qué no tomaron medidas contra Aguerrondo?
Si dijo sí, probablemente hayan matado a alguien. Es un cómplice. Si yo digo, lo que pasa que Nilo pasó por casa porque se había robado unas gallinas. Va Nilo preso y voy yo preso como cómplice, ¿verdad? En este caso, no. En este caso era un general. Y así pasa con muchas cosas.
Nosotros encontramos, por ejemplo, en un tribunal de honor unas declaraciones de Pajarito Silveira (Jorge), que relata cómo fue asesinada María Claudia (García de Gelman). Explica cómo María Claudia fue llevada en una camioneta, custodiada por un Teniente Coronel en aquel entonces, Rodríguez Buratti, al 14, y dice que entraron, que fueron muy rápidos, y que ahí cuando llegan al lugar, o sea que llegan en camioneta al lugar, tiene que haber un camino para llegar al lugar, estaban dos oficiales, Sande y Medina, excavando la tumba. Y la llevaron en la caja de la camioneta, porque Rodríguez Buratti la custodiaba. Quiere decir que estaba viva. Y fue llevada al otro día que fue sacada del Departamento 3 del SID que estaba en Bulevar y Palmar”.
Remarcando más adelante “en mi opinión, la desaparición forzada es la expresión más grande de una práctica del terrorismo de Estado que extiende el miedo en el tiempo.
¿Por qué? Porque no responden ante nadie y además desaparecen y no dicen qué fue lo que pasó. Y tú te preguntas, bueno, pero ¿dónde está? No te vamos a decir. Y el no decir, el mantener el secreto, extiende el miedo”.