La formalización y prisión preventiva de dos hombres por explotación sexual de adolescentes que se encuentran en situación de amparo en la órbita de INAU, que ya registra algún caso en Dolores y que en Mercedes, donde ocurrió este hecho, se habían desarrollado procedimientos sin que el resultado final fuera el esperado. La Cria. Silvia Cordero, actual Secretaria General de la Jefatura de Policía de Soriano, fue Directora Departamental de Violencia Doméstica y Género, pero a su vez durante años se especializó en la temática vinculada al combate de la explotación sexual de niños, niñas y adolescentes como también en la trata de personas y entendió @gesor es una referente indicada para analizar lo ocurrido y brindar su testimonio para llegar a la población como forma de prevenir y entender lo que puede estar sucediendo.

¿A qué obedece este tipo de situaciones que parecería vienen de tiempo atrás y no habían podido ser llevadas ante la Justicia con éxito como en este caso?
"Obecede a que desde hace dos años, si bien hace muchísimos años que está dándose a conocer la explotación sexual a niños, niñas y adolescentes, desde el 2016 en adelante han empezado a visualizarse y denunciarse casos. Antes estaba más tapado, lamentablemente muchas veces son situaciones que se dan dentro del seno familiar o dentro de lugares donde se supone que los niños tienen que ser protegidos tanto por la familia como por el Estado. Y ha empezado a visualizarse también por las campañas que vienen haciéndose desde hace mucho tiempo sobre cuales son los derechos que deben garantizarse y sobre todo donde están más frágiles y más expuestas la niñez y la adolescencia.
Se ve con beneplácito se esté denunciando y conociendo más sobre lo que está ocurriendo, pasamos del año 2015 donde si mal no recuerdo no llegábamos a los 50 casos, a cerca de 300 en el 2016 y en 2017 superando los 350 casos denunciados.
La prevención, el conocer, el saber que no se está ante una situación y que se esté naturalizando por el hecho que la adolescente diga y crea que está consintiendo mantener relaciones sexuales a cambio de algún provecho económico o promesa de algún tipo de provecho y de repente la desinformación de la adolescente como de su núcleo familiar crean que es algo común, estas campañas de prevención han dado a conocer que se trata de delito. Y que hacen que muchas veces un tercero denuncie no en el ámbito familiar, si no fuera de él, esta situación que se está dando él.

¿Existe una población específicamente más vulnerable? ¿Cómo juega el ámbito familiar y el hecho que en este caso sea población institucionalizada? ¿Falla el sistema?
"Sí, como en todo delito hay población más vulnerable que otra, en realidad cualquier niño, niña o adolescente está expuesto a esta clase de situaciones, siempre lo vemos más en poblaciones de riesgo que son aquellas de niños y adolescentes que sean víctimas de violencia doméstica, que los haga buscar otro tipo de vínculos, relacionarse con gente que no tiene fines lícitos con esa relación y aquellos jóvenes que provengan de un hogar pobre y que sus recursos sean escasos y vean en estas situaciones una manera de salir de las necesidades básicas que van teniendo ahí tendríamos una población en riesgo. Por eso se trabaja más con ese tipo de población, que no quiere decir jóvenes que tienen una muy buena situación económica, que de repetente tengan un entorno familiar bueno, que busquen este tipo de escape o maneras de conseguir o un provecho propio y lo hagan a través de las relaciones sexuales. Ya sea por el consumo de estupefacientes, en un hogar donde tienen una contención, presumimos que sus padres estén tratando de desvincularlos de esa situación de consumo y los adolescentes, sobre todo las mujeres, busquen ofrecer sexo a través de un pago o de drogas. Si bien hay un riesgo en todo lo que es la niñez y la adolescencia los sectores más comprometidos son aquellos que sean víctimas de violencia doméstica o de bajos ingresos".
¿Y los límites?, porque más allá de ser pobres lo que no necesariamente lleva a que se atraviese por ésto, ¿cómo juegan?
"Es el papel fundamental, el poner límites y el educar, porque tenemos dos aristas que contemplar, una es lo que se ha tratado de educar al niño y al adolescente en cuanto a su libertad sexual, tratar de educarlo en qué conductas son lícitas y cuales ilícitas, que tienen su derecho a elegir, a decir qué les gusta y qué no, pero eso ha hecho también que en algunos lugares si no está bien controlada esa educación, esa capacitación que se les da, el niño o adolescente, se crea con demasiado derecho de ir a su libre albedrío, sin escuchar el consejo de los mayores. En contrapartida tenemos los adultos, que en realidad el delito lo cometen los adultos, porque si vamos con esta educación que el adolescente puede elegir con quien mantener relaciones sexuales, es el adulto el que tiene que poner ese límite y que sabe que no puede y no debe, y está castigado por la ley el mantener relaciones sexuales y de cualquier otra índole con menor de edad y encima pagarle o darle algún tipo de provecho. No sólo es darle los límites que se le den sino como se eduque, pero esa educación también tiene que ir de la mano, con estos límites que le ponga el adulto porque si no tenemos consumidores, no vamos a tener adolescentes explotados. A la misma vez toda la era que estamos viviendo a nivel social y cultural y la tecnología donde hacen ver a los niños, niñas y adolescentes como una mercancía, como un objeto para satisfacer distintos deseos sexuales, porque no pasa únicamente por las relaciones sexuales, hablamos de la pornografía infantil que está también castigada en nuestro país y hay muchos niños, niñas y adolescentes que son víctimas y no lo saben. Y ahí volvemos a los límites, al acceso que le damos a nuestros hijos a las redes sociales, sin control de lo que suben o que no, qué tipo de fotos, qué tipo de contacto tienen, con quien se están relacionando, qué les están prometiendo y ahí está la falla fundamental que hay. La falta de control que se tiene de los adultos referentes, sea el vínculo que sea que se tenga con ese niño, esa falta de control porque confunden la libertad, y el enseñar y el ayudar a transitar por los caminos de la vida hacia la adultez, se confunde en una libertad total y en no poner los límites adecuados, en no controlar los límites adecuados"...
A nivel del Estado sin ponerla en juez para cuestionar, pero si para poder reflexionar qué puede estar pasando, algo similar a esto que pasó en Mercedes sucedió en Dolores, se trata de adolescentes institucionalizadas a cargo de quien tiene la tutela, el amparo de niños y adolescentes, sin embargo suceden estos hechos, ¿qué puede estar fallando en materia de políticas?
"Es que en realidad políticas tenemos muchísimas, pero relacionada con la respuesta anterior, sea la institución del Estado, o sea quien sea que vaya a amparar a ese niño, si realmente ha sido educado como corresponde en la puesta de límites, a veces es muy difícil querer imponer esta institución a imponer a cuidar este niño o adolescente si tiene por otra parte una educación que lo lleva a que sienta que es dueño y señor de hacer lo que quiera, que a la misma vez no se le pueden prohibir determinadas cosas porque se estaría rayando el límite de la libertad individual que podría tener ese niño, niña o adolescente, más allá que dependa o tenga la curatela o la guardia el Estado. Las políticas sociales hoy son muchas y son muy difíciles de cumplir, tanto para nosotros dentro del Ministerio del Interior por más formación y capacitación que tengamos, como padres también lo vemos difícil y eso lo tenemos que proyectar a las instituciones...".
Partiendo de la base que la primera responsabilidad está en casa, en la familia y eso es ineludible, aunque muchas veces esa contención no existe por diferentes circunstancias, y allí aparece el rol del Estado y sus instituciones. Allí queda la imagen de la existencia de políticas contradictorias, por un lado los funcionarios a cargo del cuidado de esos niños, niñas y adolescentes muchas veces chocan entre el respeto a los derechos y los límites al momento de decir que no, como en este caso el de no permitir salir de un hogar si no se tiene certeza donde se va, por más que sea un régimen abierto en determinado horario.
"Tengo esa visión, el funcionario muchas veces no tiene las herramientas necesarias para poder cumplir lo que mandata la ley como curador y como garante de ese niño y a la misma vez como no coartarle la libertad que la misma ley le da a ese niño, niña y adolescente. Muchas veces el funcionario está desbordado, son pocos, cada vez son más escasos, esto sin entrar en las políticas de cada institución si no en general. Por más políticas que se tenga, por más ganas que se tenga de trabajar a veces el número no es suficiente para estar cuidando, para estar velando por cada uno en específico porque se supone que son las 24 horas del día. Sí hay muchísimas políticas y sobre todo de la prevención, en este caso de la explotación sexual tenemos un comité específico, creado por ley en el año 2004, en la Ley 17.815, Comité Nacional para la Erradicación de la Explotación Sexual, son los encargados de crear y analizar nuevas políticas, ver en qué etapas y lugares se está fallando y como apuntar a nuevas políticas sociales para tratar que los errores que se cometan subsanarlos de la mejor manera. Falta mucho, hay mucha voluntad en el asunto, pero hay pocas herramientas, porque si a simple vista pasamos en 2015 de 50 casos a más de 350 en 2017 va a haber que proyectar más allá porque esto no es de una institución sola, no son las leyes porque están, pero puede haber alguna fuga o falla, o algún eslabón de la cadena que la componen muchas instituciones que esté fallando y la principal es la familia".