Hacía años que no se daba una situación de estas características,  que tanto Jefe como Sub Jefe de Policía Soriano se fueran por la puerta grande, si se compara el comando saliente integrado por Carlos Ayuto y Carlos Ledesma con las gestiones anteriores.  

Sin dudas que la Jefatura de Ayuto deja un saldo favorable para el departamento. 

Y pese a que todavía había mucho por hacer, la ejecutividad demostrada por los salientes en estas horas, deja un resultado que claramente está a la vista,  con cambios impulsados que ayudaron a que la Policía tuviera otra imagen frente a la sociedad.  

Con múltiples obras realizadas: nueva sede de la Unidad Especializada en Violencia Doméstica y Género,  instalación de centro de monitoreo de cámaras de seguridad, nuevas oficinas para Policía Comunitaria y DICOSE, remodelación dentro y fuera del edificio central de JPS, también en edificio de la Seccional 5a. de Dolores, entre otros cambios instrumentados a corto plazo, con recursos propios y apoyo de comisiones de vecinos, con el sólo hecho de tener voluntad de hacer las cosas. 

Además esta gestión se caracterizó por hacerle frente a venta de drogas, lo que en los últimos años costó, pero fundamentalmente con las anteriores administraciones que se vieron envueltas en las críticas que recibieron de manera permanente de parte de la sociedad, como también los problemas generados con el pago de los servicios 222, lo que llevó a que jefes y subjefes se fueran de Soriano sin poder despedirse.

El trato con la prensa y todas las instituciones públicas y privadas se había revertido plenamente, habiéndose encontrado una relación que fluía constantemente con absoluto respeto,  y con ida y vuelta que antes no se lograba, sabiendo cada uno cual es su lugar en la sociedad y el rol que juegan en ésta.

Muchas veces nos quejamos como comunidad y también quienes cubrimos las noticias policiales, respecto a que el Sub Jefe de Policía, más allá de su función administrativa, debía jugar un papel más activo en las tareas ejecutivas y en ese sentido debemos destacar lo hecho por Ledesma, que a diferencia de otros que han venido a cumplir con el trámite previo a la jubilación, asumió un rol protagónico y acompañó en primera línea las decisiones del Jefe.

En definitiva, Ayuto y Ledesma dejan la vara alta para quienes llegan, sabiendo que aun hay mucho por hacer y que en ello tiene especial significado el personal, tanto de oficiales como de sub alternos, sin el cual ninguna gestión puede llevarse adelante y para ello también debe sentirse respaldado por sus superiores cosa que ocurrió, según lo que nos hacen saber los funcionarios que están a diario en la calle, siendo la primera línea de acción y contención.

A quienes se van, la tranquilidad del deber cumplido y el agradecimiento por el trato dispensado hacia nuestra tarea sabiendo respetar cada uno su rol y a quienes llegar el deseo de éxitos sabiendo que asumen un desafío importante, que la sociedad sorianense estará expectante de la gestión, apoyando cuando corresponda y reclamando si es necesario ante la insatisfacción, por que en definitiva, el interés superior para todos, es el de una mejor calidad de vida de la gente y para ello, el orden y la seguridad pública son trascendentes.