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(por Sebastián Cáceres) En el tramo final del partido, cuando el local logró igualar el juego y el árbitro otorgó inesperadamente siete minutos de descuentos, Fraternidad sacó a relucir el temple de un verdadero campeón. Sus jugadores sacaron fuerzas desde donde ya no habían, defendieron con uñas y dientes ese resultado, y a pesar de la presión locataria, no cedieron y mantuvieron el 2 a 2 que los volvió a colocar en el sitial más alto del interior de Soriano, como hace 22 años atrás.
Así fue la final. Dramática en su último tramo porque Agraciada presionó para revertir el resultado, y Fraternidad necesitó del temple de sus jugadores para no ceder y alcanzar un título que no lograba desde 1993.
Pero antes, los dirigidos por Gastón Souberville jugaron un partido inteligente. Achicaron los espacios, en un campo de juego ancho y con un rival que le gusta avanzar por las bandas. Cuatro hombres en el medio, Pastorino, Bertocchi, Lara y Lapaz, practicaron una presión que procuró ahogar al local, a tal punto que a los cinco minutos Romero robó una pelota en el medio campo, avanzó en velocidad hasta la media luna del área mayor de Agraciada, descargó para el ingreso de Sebastián Antúnez, que con disparo cruzado abrió el marcador.
Señal inequívoca de lo que sería el campeón centrista en el partido, presionando y saliendo rápido de contragolpe. El local sintió el golpe, ahora tenía que hacer dos goles para poder forzar una definición desde el tiro penal.
Si bien tuvo la pelota y la iniciativa del juego, Agraciada careció en la primera parte de profundidad para inquietar la última zona de Fraternidad, que tuvo en su meta, Sebastián Ciganda, y en los dos centrales, Javier Calero y Daniel Iturrioz, la seguridad necesaria para transitar la final con la mayor firmeza posible. Los laterales tampoco desentonaron. Es que en términos generales la oncena titular del decano jugó de cinco puntos para arriba y muchos de ellos, tuvieron destacada participación.
En esa primera parte Fraternidad no perdió nunca la compostura y tampoco el rival hizo mayores méritos para poner en aprietos al campeón centrista. Incluso la oportunidad mas clara de gol tras la apertura del marcador fue nuevamente para la visita, cuando un centro de Bertocchi desde el sector derecho del ataque, fue conectado en el área por Franco Romero y el cabezazo se perdió apenas afuera.
Agraciada manejó la pelota por intermedio de Urruti y Ginovart, el primero no había estado en la primera final al estar suspendido. Arriba Andriolli, un centro delantero carmelitano fue lo más peligroso, sobre todo en el complemento.
Con resultado parcial de uno a cero, Fraternidad se fue al descanso sabiendo que la obtención del campeonato dependería en gran parte de su rendimiento. El equipo había funcionado correctamente, cerrando los espacios al rival, y saliendo rápido de contragolpe.
En el segundo tiempo la presión fue mayor de Agraciada. Sumó hombres en el medio y el ataque y de apoco fue inclinado la cancha a su favor, ayudado por un Fraternidad que comenzó a sentir el trajín del partido, y cedió metros en el terreno.
De todas manera la visita no dejó nunca de ser peligrosa cuando cruzaba la línea media. Y a los 18 minutos del complemento, una jugada personal de la contratación de Fraternidad para este torneo, el jugador de Egaña, Franco Romero, avanzó en diagonal hacia el área sacando un remate cruzado que hizo estéril el esfuerzo del meta Reyes para evitar la caída de su arco.
Era el segundo y parecía partido cerrado. Agraciada ahora tenía que convertir tres goles para forzar los penales. Jugado al todo o nada el conjunto locatario se fue arriba a base de centros y desbordes por el sector derecho del ataque, y en uno de ellos su delantero Andreolli logró el descuento. Ya había ganado por arriba un par de veces, en base a su corpulencia y estatura. De contra el decano lo pudo liquidar, pero falló Romero en la definición una vez, y en otro el palo impidió que Antúnez anotara el tercero.
Un tiro libre de Armando Ginovart cuando iban 45 minutos de juego permitió al local igualar el partido, y abrió una interrogante sobre el final del juego. Para colmo de males el árbitro anunció 7 minutos de descuentos, un disparate para un encuentro que casi no tuvo parates.
Fue en ese momento donde Fraternidad se plantó en la cancha como un verdadero campeón. Con un árbitro que pareció permeable a los reclamos locales, el público que empujó desde afuera y con un equipo local que fue en busca del triunfo, la vista sostuvo el temporal con gran hidalguía.
La suerte ya estaba echada. Como hace 22 años atrás, cuando en 1993 otro equipo de Fraternidad asombraba al fútbol del interior de Soriano coronándose por primera vez como campeón, este mostraba el temple de una institución a la que pocos creyeron podría llegar a esta instancia. Y ahí debe estar la explicación de este triunfo, el convencimiento íntimo de un grupo que pasó a duras penas la serie (por un gol de diferencia) pero en las semifinales y finales, demostró que el traje de campeón está hecho a su medida.
El mejor equipo del interior de Soriano está en la Liga del Centro, es de la localidad de Rodó, se llama Fraternidad y detrás de él hay una historia de 93 años que explica porqué instituciones como éstas son capaces de seguir escribiendo páginas de gloria como la del sábado a la noche en Agraciada. Salud Campeón, el trofeo está en buenas manos.
Por puntos
Fraternidad logró el título al obtener mas puntos que Agraciada. Los tres del primer partido jugado en Rodó, donde ganó 3 a 2 y la unidad del sábado donde igualó 2 a 2.
Los detalles
Final Torneo Departamental de Clubes de Soriano Interior . Localidad de Agraciada. Público: 1.000 personas. Jueces: Eduardo Castillo, Fredy Berriel y Luis Ghesi (Carmelo).
Agraciada 2
Reyes
A. Castillo
N. Cerruti
E. García
J. Rodríguez
A. Ginovart
Galo
Urruti
F. Centenaro
A. Andreolli
F. Frachelli
DT: H. Aguiar
Goles de Agraciada: 71' Alfredo Andreolli, 90' Armando Ginovart. Cambios en Agraciada: P. Grajales por F. Centenaro, G. Cipollini por M. Galo y M. Dorrego por N. Cerruti.
Fraternidad 2
S. Ciganda
J. Calo
F. Lara
Iturrióz
N. Sosa
Pastorino
Bertocchi
Lara
N. Lapaz
F. Romero
S. Antúnez
DT: G. Souberville
* Foto y texto gentileza de Periódico Centenario.
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(por Sebastián Cáceres) En el tramo final del partido, cuando el local logró igualar el juego y el árbitro otorgó inesperadamente siete minutos de descuentos, Fraternidad sacó a relucir el temple de un verdadero campeón. Sus jugadores sacaron fuerzas desde donde ya no habían, defendieron con uñas y dientes ese resultado, y a pesar de la presión locataria, no cedieron y mantuvieron el 2 a 2 que los volvió a colocar en el sitial más alto del interior de Soriano, como hace 22 años atrás.
Así fue la final. Dramática en su último tramo porque Agraciada presionó para revertir el resultado, y Fraternidad necesitó del temple de sus jugadores para no ceder y alcanzar un título que no lograba desde 1993.
Pero antes, los dirigidos por Gastón Souberville jugaron un partido inteligente. Achicaron los espacios, en un campo de juego ancho y con un rival que le gusta avanzar por las bandas. Cuatro hombres en el medio, Pastorino, Bertocchi, Lara y Lapaz, practicaron una presión que procuró ahogar al local, a tal punto que a los cinco minutos Romero robó una pelota en el medio campo, avanzó en velocidad hasta la media luna del área mayor de Agraciada, descargó para el ingreso de Sebastián Antúnez, que con disparo cruzado abrió el marcador.
Señal inequívoca de lo que sería el campeón centrista en el partido, presionando y saliendo rápido de contragolpe. El local sintió el golpe, ahora tenía que hacer dos goles para poder forzar una definición desde el tiro penal.
Si bien tuvo la pelota y la iniciativa del juego, Agraciada careció en la primera parte de profundidad para inquietar la última zona de Fraternidad, que tuvo en su meta, Sebastián Ciganda, y en los dos centrales, Javier Calero y Daniel Iturrioz, la seguridad necesaria para transitar la final con la mayor firmeza posible. Los laterales tampoco desentonaron. Es que en términos generales la oncena titular del decano jugó de cinco puntos para arriba y muchos de ellos, tuvieron destacada participación.
En esa primera parte Fraternidad no perdió nunca la compostura y tampoco el rival hizo mayores méritos para poner en aprietos al campeón centrista. Incluso la oportunidad mas clara de gol tras la apertura del marcador fue nuevamente para la visita, cuando un centro de Bertocchi desde el sector derecho del ataque, fue conectado en el área por Franco Romero y el cabezazo se perdió apenas afuera.
Agraciada manejó la pelota por intermedio de Urruti y Ginovart, el primero no había estado en la primera final al estar suspendido. Arriba Andriolli, un centro delantero carmelitano fue lo más peligroso, sobre todo en el complemento.
Con resultado parcial de uno a cero, Fraternidad se fue al descanso sabiendo que la obtención del campeonato dependería en gran parte de su rendimiento. El equipo había funcionado correctamente, cerrando los espacios al rival, y saliendo rápido de contragolpe.
En el segundo tiempo la presión fue mayor de Agraciada. Sumó hombres en el medio y el ataque y de apoco fue inclinado la cancha a su favor, ayudado por un Fraternidad que comenzó a sentir el trajín del partido, y cedió metros en el terreno.
De todas manera la visita no dejó nunca de ser peligrosa cuando cruzaba la línea media. Y a los 18 minutos del complemento, una jugada personal de la contratación de Fraternidad para este torneo, el jugador de Egaña, Franco Romero, avanzó en diagonal hacia el área sacando un remate cruzado que hizo estéril el esfuerzo del meta Reyes para evitar la caída de su arco.
Era el segundo y parecía partido cerrado. Agraciada ahora tenía que convertir tres goles para forzar los penales. Jugado al todo o nada el conjunto locatario se fue arriba a base de centros y desbordes por el sector derecho del ataque, y en uno de ellos su delantero Andreolli logró el descuento. Ya había ganado por arriba un par de veces, en base a su corpulencia y estatura. De contra el decano lo pudo liquidar, pero falló Romero en la definición una vez, y en otro el palo impidió que Antúnez anotara el tercero.
Un tiro libre de Armando Ginovart cuando iban 45 minutos de juego permitió al local igualar el partido, y abrió una interrogante sobre el final del juego. Para colmo de males el árbitro anunció 7 minutos de descuentos, un disparate para un encuentro que casi no tuvo parates.
Fue en ese momento donde Fraternidad se plantó en la cancha como un verdadero campeón. Con un árbitro que pareció permeable a los reclamos locales, el público que empujó desde afuera y con un equipo local que fue en busca del triunfo, la vista sostuvo el temporal con gran hidalguía.
La suerte ya estaba echada. Como hace 22 años atrás, cuando en 1993 otro equipo de Fraternidad asombraba al fútbol del interior de Soriano coronándose por primera vez como campeón, este mostraba el temple de una institución a la que pocos creyeron podría llegar a esta instancia. Y ahí debe estar la explicación de este triunfo, el convencimiento íntimo de un grupo que pasó a duras penas la serie (por un gol de diferencia) pero en las semifinales y finales, demostró que el traje de campeón está hecho a su medida.
El mejor equipo del interior de Soriano está en la Liga del Centro, es de la localidad de Rodó, se llama Fraternidad y detrás de él hay una historia de 93 años que explica porqué instituciones como éstas son capaces de seguir escribiendo páginas de gloria como la del sábado a la noche en Agraciada. Salud Campeón, el trofeo está en buenas manos.
Por puntos
Fraternidad logró el título al obtener mas puntos que Agraciada. Los tres del primer partido jugado en Rodó, donde ganó 3 a 2 y la unidad del sábado donde igualó 2 a 2.
Los detalles
Final Torneo Departamental de Clubes de Soriano Interior . Localidad de Agraciada. Público: 1.000 personas. Jueces: Eduardo Castillo, Fredy Berriel y Luis Ghesi (Carmelo).
Agraciada 2
Reyes
A. Castillo
N. Cerruti
E. García
J. Rodríguez
A. Ginovart
Galo
Urruti
F. Centenaro
A. Andreolli
F. Frachelli
DT: H. Aguiar
Goles de Agraciada: 71' Alfredo Andreolli, 90' Armando Ginovart. Cambios en Agraciada: P. Grajales por F. Centenaro, G. Cipollini por M. Galo y M. Dorrego por N. Cerruti.
Fraternidad 2
S. Ciganda
J. Calo
F. Lara
Iturrióz
N. Sosa
Pastorino
Bertocchi
Lara
N. Lapaz
F. Romero
S. Antúnez
DT: G. Souberville
* Foto y texto gentileza de Periódico Centenario.
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