Este viernes es un día trascendente para los sorianenses en general y los mercedarios en particular, ya que luego de años de reclamo para el traslado de la cárcel departamental ubicada en el corazón de la capital de Soriano, esto finalmente se concreta y con un edificio moderno, con espacios amplios que permitirán cumplir con el cometido de los centros de reclusión, el de rehabilitar a los reclusos para el regreso a la vida en comunidad, que hasta ahora era prácticamente imposible por las condiciones en que estaban viviendo los reclusos de Soriano y la región.

La situación en la cárcel departamental de Mercedes era desde hace varios años realmente insostenible desde lo edilicio, de lo estructural y fundamentalmente desde la capacidad locativa, algo que venía arrastrándose desde hace mucho tiempo en que la cantidad de reclusos sobrepasa largamente los que podrían alojarse y cuando se habla de inseguridad, ello tampoco ayuda, porque muy lejos está ese recinto de cumplir el rol de rehabilitación de los individuos que caen en el delito para que vuelvan a la sociedad preparador para una segunda oportunidad de vida digna, sino todo lo contrario muchos salen “especializados” en el delito.

Pero a su vez, si bien sabemos del esfuerzo del Patronato de Encausados y Liberados y de las propias autoridades carcelarias por brindar capacitación, formación, herramientas para ofrecerles un oficio que pueda ayudar a enfrentar la vida con otras perspectivas, en los hechos ello no “luce”, sino que era alarmante que casi ocho de cada diez reclusos alojados allí, vuelven a delinquir y regresan a la cárcel, de esa manera el perjuicio es para la propia comunidad, más allá del individuo como tal que tampoco consigue establecer algo de esperanza en su vida de futuro.

Era el centro de reclusión con mayor porcentaje de reincidencia, ¡de todo el país! Y eso es algo sobre lo que las autoridades y el propio Patronato expresaron su preocupación.

El hecho que se haya creado la nueva cárcel, allí en paraje Pense, con instalaciones dignas, con espacios suficientes para crear otros hábitos alejados del delito, brindará las herramientas adecuadas para que se cumple el precepto que las cárceles son para reeducar y rehabilitar, porque además ya no existe la Dirección Nacional de Cárceles sino que se creó el Instituto Nacional de Rehabilitación.

Y precisamente a la órbita del INR pasó desde el 2 de febrero la ahora denominada Unidad 24 Pense cuya inauguración se produce este viernes con la presencia -entre otras autoridades- del Ministro del Interior, Eduardo Bonomi.

Para atender esta flamante planta edilicia y con grandes espacios, el INR llamó a ingresos de personal para cubrir los cargos de operadores penitenciarios ya que en la política actual el relacionamiento que se daba en la cárcel de Mercedes entre reclusos y policía aquí no existirá salvo situaciones especiales, el relacionamiento directo será con los operadores penitenciarios sean hombres o mujeres, que además actúan sin portar armas en una apuesta muy diferente a la que se tenía hasta ahora en ese relacionamiento.

LA UNIDAD 24 PENSE

La obra se inició a fines de enero 2014 y se preveía nueve meses de plazo pero con los días de lluvia y algunos días de paro, llevó algo más de tiempo.

En cuanto a las obras en general la nueva cárcel consiste en un puesto de control en el ingreso, la calle central actual se mantiene para circulación, un edificio de dirección a la entrada, otro para las visitas, el edificio principal es el celdario de hombres que tiene cuatro sectores, cada uno independiente. 

Enfrente se ubica el edificio de admisión y observación, con celdas y consultorios para enfermería, atrás de éste está el pabellón de mujeres.

Respecto del edificio central, cada uno de los cuatro sectores, tiene siete celdas para seis reclusos cada una, o sea una capacidad de 168 reclusos. Las celdas tienen 3 metros de ancho por 6,20 metros de largo. En cada sector del celdario hay un taller o una sala de estar pensado para que los reclusos sola­mente estén en la celda durante la noche, en el resto del día tengan actividades. Tienen patios, un sector de canchas, zonas de chacra. El celdario aproximadamente mide 65 metros por 65 metros, se estima en unos 3.800 metros cuadrados incluyendo el patio que está en el centro de cada sector. Los patios tienen muro hasta arriba, no hay vinculación entre un patio y otro. En principio son todos de igual seguridad. El equipamiento fijo de la celdas incluye camas de hormigón, estanterías de hormigón para que cada uno tenga su sector. Hay nueve garitas levantadas de tres metros.

La cárcel de mujeres tiene cuatro celdas comunes que como no llevan equipamiento fijo, cuentan con espacio de 3,5 metros por 3,5 metros, y hay otras cuatro celdas individuales, además de dos habitaciones maternales con baño aparte, un sector indepen­diente con su patio.

En el edificio donde está la cocina se instalaron cámaras de frío y anafes suministrados por la empresa.

Para colocar la losa radiante la fundación del edificio se hizo en dos partes, tras la primera capa ingresó la empresa sub contratada especialista en colocar la losa radiante y luego se completó el resto del piso.

Se trata de una losa que está templada, se usará en invierno, está previsto, determinadas horas de uso por día.

En lo que tiene que ver con la vieja edificación de la seccional 3ª fue reformada y remodelada, y detrás de ellas se levanta otra barraca que hará las veces de pabellón con cuatro dormitorios y los respectivos servicios.

Recientemente estuvo en Mercedes, delegación del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) quien se ocupa de ahora en más de la cárcel, dejando de estar en la órbita de la Jefatura de Policía de Soriano, encabezando el grupo el encargado de la dirección de la zona Interior, maestro Alberto Brusa.

En la oportunidad estuvieron reunidos con el entonces Intendente Agustín bascou a quien plantearon la necesidad de apoyo desde la comuna para poder realizar el traslado de los familiares de los reclusos durante los días del fin de semana para las visitas autorizadas. En ese sentido Brusa destacó el aporte de la comuna que permitirá ayudar al traslado de familiares a la Unidad 24 Pense.

(*) Fotografía de Unicom-Ministerio del Interior.